viernes, 23 de febrero de 2018

RUTA POR LA ZARZA DE MONTÁNCHEZ

"RUTA  ZARZA DE MONTÁNCHEZ"
En la cuarta semana de febrero la escuela-taller “Dehesarrollando”, ha visitado dos localidades de la Mancomunidad Sierra de Montánchez y Tamuja: Zarza de Montánchez y Albalá. Siendo estas las dos únicas que faltaban por visitar después de realizar una ruta por cada una de las poblaciones de los alumnos. 
Zarza de Montánchez
El día 19 de febrero, pusimos rumbo a Zarza de Montánchez. Allí, nuestro compañero Pedro, nos guió por una de las rutas que el pueblo ofrece. Realizamos un recorrido de 12 kilómetros por el que disfrutamos del ecosistema que nos rodea.
Tipo de Ruta  
Realizamos una ruta circular, a pie, interpretativa, naturalista, dentro y fuera del núcleo urbano.


Ruta Zarza de Montánchez
 Itinerario
Comenzamos la ruta a las 9:00 de la mañana desde la churrería del pueblo. Lo primero que visitamos fue “El Pozo del Legío” este es uno de los pozos más antiguos del pueblo. Se utilizaba para dar de beber a los animales. Tiene entre 10 y 12 metros de profundidad. Este pozo se usaba antiguamente para dar de beber a los animales. Luego, nos dirigimos hacia “El Pozo de la Fontanilla” o también conocido como “El Pozo de la Cagaluta” antiguamente su agua era potable, pero, a día de hoy ya no lo es. Tiene una profundidad similar al anteriormente nombrado.                

Pozo del Legío
El pueblo cuenta con unos apartamentos o casas rurales (cinco en total) que antes pertenecían al ayuntamiento pero a día de hoy pertenecen a una empresa privada. Estos tres lugares se encuentran dentro del núcleo urbano, a partir la ruta se desarrollo fuera del núcleo urbano.

La primera parada fue “Es estanque” dónde hay peces de colores.
“El Pozo del Prao” fue el siguiente punto a visitar que servía también para dar de beber al ganado. Tiene a su alrededor diez pilas en las que se vertía el agua. A unos pocos metros se encuentra un puente romano que deja cruzar el rio Tamuja. Es un puente de tres ojos, situado al lado del parque y cruza el rio Tamuja y se encuentra en el camino que lleva a la “Encina Terrona”. Siguiendo por el camino que lleva a este árbol singular encontramos un horno de leña donde se cocían tejas y ladrillos de barro. Este es conocido como “El Horno de Adobe”
         
Por una de las cosas que se conoce esta localidad es por albergar la encina centenaria más grande de la Península Ibérica y posiblemente de Europa. Se le estima una edad de 800 años y destaca por la belleza de su estructura y por su prodigiosa biometría. Su altura de de 16,50 metros, la copa ancha y muy irregular, presenta un diámetro máximo de 28 metros y el perímetro del tronco es de 7,80 metros a 1,30 de altura.

Encina Terrona

Dejando atrás una de las 7 maravillas de la mancomunidad, aparece una de las calzadas más antiguas del pueblo, que era la vía principal de tránsito antiguamente. Avanzado por este peculiar camino, llegamos a “La Charca del Becerrado” actualmente bastante vacía por la escasez de lluvias.

Alrededor de las 11:30, paramos para hacer un descanso y comer algo en la zona de los molinos donde también se encuentra una fuente natural. 
Tras haber cogido fuerzas, fuimos al pantano del pueblo también conocido con “Presa de Navarredonda”. La capacidad de este embalse es de 0.968 Hm3. Su altura sobre cimientos es de 16.00 metros, la longitud de coronación es de 202,65 metros y sus núcleos de abastecimiento son Benquerencia, Botija, Plasenzuela, Robledillo de Trujillo, Ruanes, Salvatierra de Santiago, Santa Ana, Torre de Santa María y Zarza de Montánchez. 

La Presa de Navarredonda

 Dejando atrás el pantano, nos dirigimos hacia “La Charca de la Nava”  Para los amantes de las aves, Zarza de Montánchez cuenta con un hide (observatorio de aves) donde podemos avistar una gran variedad de aves de la zona.

Observatorio de aves o "Hide"
Y tras esta charca y finalizando la ruta, muy próxima al pueblo nos topamos con otro pozo, este es el llamado “Pozo Techao”. Este es uno de los pozos que hoy en día sigue siendo potable y que los habitantes del pueblo utilizan para refrescarse tras finalizar la ruta. Para finalizar, de nuevo dentro del núcleo urbano, vimos “El Pozo de la Laguna”.
Nos ha parecido una ruta muy interesante por su contenido y además novedosa, pues nos dimos cuenta que cerca de nuestros pueblos tenemos paisajes espectaculares y cosas tan singulares como la “Encina Terrona”.

Inés María Guerra
Juan Antonio Gutiérrez
Isabel Ortiz

RUTA POR ALBALÁ

RUTA ALBALÁ
Albalá
El martes de esta semana, nuestra compañera Catalina nos organizó una ruta por su pueblo, Albalá. El principal atractivo de esta ruta son los diferentes pozos con los que el municipio cuenta. Tanto dentro como fuera del núcleo urbano, encontramos multiples pozos de diferentes épocas.
Tipo de Ruta
Fue una ruta mixta, es decir, parte del recorrido fue circular y otra parte lineal. Fue una ruta a pie, interpretativa, naturalista dentro y fuera del núcleo urbano, con una distancia de 9 kilómetros aproximadamente y una duración de cuatro horas. 

Ruta por Albalá

Itinerario
Pozo de la Moraleja
Comenzamos la ruta a las 9:00 de la mañana en  un bar del pueblo. Desde allí fuimos al primero de nuestros destinos que era “El Pozo de la Moraleja”. Allí, Cati nos explico que se trataba de un pozo de cantería, techado y en el que podíamos encontrar pintados en una de las vigas, símbolos de la falange.
     
El siguiente pozo que visitamos fue “El Pozón”, se encuentra a las afueras del pueblo y sigue siendo utilizado a día de hoy para abastecer a los campos y el ganado de los habitantes del pueblo.
Después nos encontramos el pozo llamado “ Fuente Vieja” y a continuación con el “El Pozo Burrero”, este segundo es un pozo bastante nuevo pues se construyó en 1953, su forma es muy similar a la del pozo de “La Moraleja” solo que sus dimensiones son menores.  Allí, Cati nos contó que la cruz que aparece sobre una de sus columnas se puso en honor a una chica que falleció a causa de un rayo. 
Durante todo el camino podemos observar unas maravillosas vistas del ecosistema del pueblo. A lo lejos se avistan los pueblos de Alcuéscar y Montánchez con su castillo.
A un kilómetro de este último pozo, visitamos “Fuente Nueva”, aunque hay que decir que fue construida mucho antes que el pozo llamado “Fuente Vieja”.

Pozo Fuente Nueva
En la siguiente parada, una vez visto el pozo de “La Broncana” y ya colindando con el termino de Montánchez,  aprovechamos para comer y reponer fuerzas. Este fue el tramo lineal de la ruta donde volvimos sobre nuestros pasos para volver al pueblo. Cerca de esta zona estaba la angtigua fabrica de harina que daba sustento al pueblo y alrededores, a día de hoy pertenece a diferentes dueños. En este trayecto, Cati nos conto una de las curiosidades del camino: años atrás, un chico en su caballo piso uno de los cables que daban energía a la fabrica de harina y murió, por este motivo y en el punto en el que ocurrió hay otra cruz en honor a este chico. De vuelta en el pueblo, vimos “La Charca de la Albuera” aquí pudimos observar de cerca cigüeñelas que se encontraban en esta charca.
Desde aquí, nuestra compañera nos llevó a visitar la iglesia del pueblo, cuya patrona es la Virgen de Santa María Magdalena. Se cree que su fundación data de 1420. Está construida a base de sillería con piezas irregulares en algunas zonas del muro y también con mampostería de una sola nave de cuatro tramos y una cabecera de testero plano, todo ello cubierto mediante bóveda de crucería que descansan sobre arcos de medio punto. La más rica es la de la capilla mayor. Se pueden ver diversos retablos laterales y tablas policromadas de los siglos XVII y XVIII (estilo barroco) de variada calidad, descollando una escultura de la Inmaculada fechada por el año 1600. A los pies está el coro, sostenido por tres arcos de medio punto y realizados en cantería.
             
Finalizando la ruta, sobre las 13:00, paramos a hacer un descanso y refrescarnos. A continuación pasamos por el antiguo cine que había en la localidad hasta llegar al Rollo o Horca de Piedra o Picota, es una columna con fuste de piedra y capitel rematado con cruz labrada, por basamento tiene tres peldaños ensamblados en piedra. Fue la insignia y símbolo de jurisdicción, sirviendo en muchos casos como picota, y donde exponían públicamente las cabezas de los ajusticiados o los reos a la vergüenza.El último punto visitado fue “El Calvario” que consta de tres cruces típicas del pueblo.

El Calvario

Festividades y Tradiciones
Los gallos: se celebran durante los carnavales (Lunes, Martes, Miércoles, Domingo y Sábado que le precede). Las famosas corridas de gallos, hacen que desde tiempos inmemorables se conserve en este municipio una espectacular cabaña equina. Caballos, burros y ponis, se engalanan cada año para la ocasión, luciendo entre otros la famosa manta gallera, de preciosa elaboración artesanal, que llena la corredera de alegría y colorido en estos días, que son los más grandes para los habitantes de este pequeño municipio.

Esta ruta nos ha parecido muy enriquecedora y bastante cómoda de hacer. Una ruta ideal para hacer en familia. 

Inés María Guerra
Juan Antonio Gutiérrez 
Isabel Ortiz

viernes, 9 de febrero de 2018

RUTA POR VALDEFUENTES



DISTANCIA RECORRIDA: 11 KM

El día 8 de Febrero la Escuela Profesional de Extremadura “Dehesarrollando” de la especialidad de Interpretación y Educación Ambiental visitó el pueblo de Valdefuentes, situado en la provincia de Cáceres.

La situación climatológica no era buena ya que era un día muy frio pero empezamos la ruta con muchas ganas, a lo largo de la mañana empezaron a salir los primeros rayos de sol y el dia fue mejorando.



En pleno corazón de la comarca de Montánchez, con un particular encanto, bien comunicado y en el triángulo de lo que podrían considerarse poblaciones claves en cuanto a desarrollo, historia e importancia actual (Cáceres, Trujillo y Mérida), se encuentra Valdefuentes, un pueblo que ronda los 1500 habitantes dispuesto siempre a acoger al visitante y sorprenderle.
Los orígenes de este municipio se remontan a la Edad del Bronce y en sus alrededores hubo también una intensa colonización romana como atestiguan los restos de lápidas funerarias encontradas en los parajes de Valdelagrulla, Palacios, Majanos y Majales. A finales de la Edad Media era un conglomerado de casas entorno al barrio de Gurumeña, probablemente antiguo poblado árabe. A partir de este núcleo fue creciendo el pueblo, construyéndose después la iglesia de Nuestra Señora de Bienvenida. El lugar de Valdefuentes perteneció a la Orden de Santiago, de la que fue desmembrado, con permiso papal, e incorporado a la Corona.
Felipe II de España lo vendió, por escritura fechada el 11 de julio de 1558, a Álvaro de Sande, por los méritos contraídos en la defensa de la plazas de Gelves y Malta. De esta forma Valdefuentes pasó a ser villa de señor laico. El I Señor de Valdefuentes mandó construir una casa-palacio, de estilo renacentista, diseñada por Pedro Fernández de Trujillo, y un rollo como signo representativo de su poder jurisdiccional.
Durante la Guerra de Sucesión Española, Valdefuentes, como toda la comarca de Montánchez, apoyó la causa de Felipe de Borbón.
A la caída del Antiguo Régimen la localidad se constituye en municipio constitucional, entonces conocido como Val de Fuentes en la región de Extremadura que desde 1834 quedó integrado en Partido Judicial de Montánchez. En el censo de 1842 contaba con 350 hogares y 1917 vecinos
Comenzamos nuestra ruta con buen paso desde la Plazuela del Convento rumbo a una de las queserías del pueblo para ver cómo se elabora este exquisito producto.




Seguidamente caminamos hacia “El Regajo” donde pudimos ver varias infraestructuras de la localidad, como: la plaza de toros, piscina, escuelas, centro de salud, pisos tutelados, residencia de mayores, campo de fútbol, etc.


                                                            El Regajo de Valdefuentes

Siguiendo con la ruta, salimos del pueblo y nos dirigimos hacia el paraje conocido como el Puente Capellán, un lugar precioso donde poder dejar volar tu imaginación contemplando el agua correr entre los arcos del puente, numerosas rocas, molinos y un río nos dan la bienvenida a este paraje. Este puente fue construido en la época romana por tanto es un puente romano.




                                  Puente del Capellán

Mientras caminamos observamos a nuestro alrededor la fauna y la flora que nos rodea: La vegetación es muy variada, con abundancia de matorral de retamas en los montes. En las zonas más altas aparecen encinas en los valles, sobre todo en los más abrigados. También podemos encontrar gran cantidad de olivos e higueras.

Entre otras muchas, especies tan emblemáticas como abubilla, águila culebrera, milano real, ánade real (azulón), zorro, nutria europea, murciélago de Cabrera, jabalí, corzo, culebra de herradura, culebra viperina, etc.

Es este uno de los paisajes extremeños donde podemos observar con más facilidad el comportamiento de las avutardas. Además de esta especie, en estas llanuras próximas a la capital cacereña, desprovistas casi por completo de árboles, destacan las altas poblaciones de sisones, perdices,cigueñas negras, aguiluchos cenizos o cernícalos primillas.
Entre los mamíferos destacamos especies como: la Liebre, Musaraña, Zorro, Nutria, Lirón careto, Gineta, Erizo, etc.
Los reptiles y anfibios están representados por la Lagartija colirroja, Lagarto ocelado, Culebra de herradura y el Sapo de espuelas.
Seguimos caminando y encontramos la Presa de Casillas. La Presa de Casillas II fue construida en el año 1565 sobre el cauce del río Santa María y forma parte de del municipio de  Valdefuentes, en la provincia extremeña de Cáceres.
La Presa de Casillas II es de gravedad con una altura desde cimientos de 9 m y una longitud de coronación de 80 m. 
El Embalse de Casillas II pertenece a la Cuenca Hidrográfica del Tajo y tiene una capacidad de 0,100 hm3.
Visitamos su muralla y sus molinos harineros , el primer molino esta adosado al parametro de la presa y el edificio esta construido con manposteria de granito y ladrillo macizo. El segundo molino se encuentra a muy poca distancia conectado por un canal en el que el agua se reutiliza , es decir, el agua del primer molino es utilizado en el segundo. Estos molinos datan del siglo XVI.



                                                                    Presa de casillas II

Regresamos al pueblo por caminos, pero antes hacemos una parada en el pozo del campillo.

Entramos en Valdefuentes por el barrio emblematico de Gurumeña de la edad de bronce , a finales de la edad media era un aglomerado de casas. La primera casa sigue en pie aunque reformada y tiene en la fachada un escudo con la flor de lis, y por ultimo destacamos los restos de un cementerio que datan del año 1755.

A partir de este núcleo fue creciendo el pueblo, construyéndose después la iglesia de Nuestra Señora de Bienvenida, rodeada del barrio gurumeña. El documento mas antiguo de la iglesia de nuestra señora de bienvenida es del año 1583 y se cree que su construcción fue anterior pero sin saber la fecha exacta.

El lugar de Valdefuentes perteneció a la Orden de Santiago, de la que fue desmembrado, con permiso papal, e incorporado a la Corona.



                                                                   Barrio de Gurumeña

Caminamos por el barrio de Gurumeña hasta llegar a la Iglesia de Nuestra Señora de Bienvenida, Edificio barroco de carácter popular construido en el siglo XVII, aunque con diversos vestigios del siglo anterior. Levantado a base de mampostería y sillarejo, consta internamente de una nave con triple tramo y cabecera ochavada de tres paños, a la que se adosa un camarín de planta rectangular. La capilla mayor se remata mediante un casquete de cuarto de esfera, en tanto que la nave aparece cubierta con bóveda de cañón con lunetos, a excepción del tramo inmediato al presbiterio, que presenta crucería sencilla. También bóveda nervada, aunque más compleja, encontramos en la capilla bautismal adosada a los pies, que constituye la base de una maciza torre prismática de tres cuerpos. Posee coro, elevado sobre dos arcos carpaneles, y sencillas portadas, estando la de los pies precedida por un pequeño pórtico. Contiene esta parroquial diversos retablos e imágenes barrocas de los siglos XVII y XVIII. Merece destacarse el retablo mayor de un cuerpo dividido en tres calles, con la imagen de vestir de la titular.


                                                Iglesia de Nuestra Señora de Bienvenida



Mirando las fachadas de Valdefuentes se podía ver un arte peculiar, sorprende sobre todo la utilización del esgrafiado, una técnica decorativa de influencia morisca muy abundante en sus calles.
El esgrafiado se consigue extendiendo sobre la fachada dos capas de revoco de distinto color, compuesto por una mezcla de cal y arena, dibujando en la externa el motivo ornamental. Después, al eliminarla, la de abajo aparece con un color de revoco distinto. Este proceso da lugar a una decoración bicolor con temas más o menos geométricos, que se repiten de forma regular por toda la superficie de la fachada. Valdefuentes está lleno de muestras de este tipo de decoración, algunas de singular belleza y dificultad.



                                                         Esgrafiado


No se concibe esta ruta sin pasar por una de las tantas bodegas que hay en el municipio de Valdefuentes, un vino exquisito, el del pueblo de Valdefuentes.





Seguidamente visitamos la Plaza de España de Valdefuentes donde se encuentra el emblemático rollo Ya quedó señalado como ejecutoria y signo de la jurisdicción civil y penal del Señorío de Valdefuentes. Es un interesante monumento de piedra. Está compuesto por un grueso pilar cilíndrico de fino granito, con estrías de desigual relieve por el contraste que ofrecen las del tercio más bajo, con las del resto de la superficie. Se apea sobre base circular de doble bocel, de las mismas proporciones.



                                                           El Rollo

Seguimos caminando por este pueblo lleno de encanto y nos encontramos con la Iglesia de San Agustín. El templo conventual es bien proporcionado, con nave central y dos capillas laterales, crucero y ábside de planta rectangular, destacando en su conjunto la carpintería de sus puertas.
Fundado bajo el patrocinio de Ana de Sande y Padilla y su marido, Alfonso de Lancaster, fue concebido como panteón de la familia, levantándose sobre una lonja elevada, por estas y otras coincidencias se le ha denominado el Pequeño Escorial; el templo conventual es bien proporcionado, con nave central y dos capilla laterales, crucero y ábside de planta rectangular, destacando en su conjunto la carpintería de sus puertas, el retablo mayor y la capilla sepulcral, situada en el trasaltar, siendo su portada obra de transición del herreriano al barroco, también de estilo herreriano es el claustro. El conjunto se completa con una hornacina central con la imagen del titular y los escudos de los patrocinadores. El templo posee retablo mayor del siglo XVIII con tallas policromadas de la misma centuria.



                                                             Convento de San Agustín


Y terminamos nuestro recorrido y ruta visitando El Museo Etnográfico de Valdefuentes, abierto desde enero de 2004, está ubicado en la planta baja del Antiguo Convento de Los Agustinos Recoletos. Muestra la artesanía popular de nuestra localidad así como los aperos de labranza, a través de los cuales el visitante podrá profundizar y entender el modo de vida de la localidad. Lo más destacado expuesto, son Los Tableros, una fiesta centenaria que se celebra el primer sábado de octubre en honor a la Virgen del Rosario. Sin olvidarnos de las muestras de esgrafiado, una técnica de decoración de fachadas de influencia morisca muy extendida por toda la localidad la cual ha sido reconocida en 2013 por el Gobierno de Extremadura como "Capital Regional del Esgrafiado". Además, se puede visitar el Claustro del Convento de San Agustín, una de las 7 Maravillas de la Comarca Sierra de Montánchez y Tamuja, donde se celebran exposiciones de pintura, conciertos de piano y de coral, etc. Este museo es el punto de partida de las dos Rutas del Esgrafiado y desde donde proveemos de información turística al visitante.


                                                                Museo etnográfico



Os recomendamos visitar Valdefuentes, este precioso rincón de Extremadura tan lleno de historia y belleza.

martes, 6 de febrero de 2018

RUTA POR VALDEMORALES


RUTA POR VALDEMORALES: CERRO LIMÓN, LA SIERRA Y FUENTE SANTA ANA.

DISTANCIA DE LA RUTA: 8 km.

El pasado día 5 de febrero de 2018 los alumnos-trabajadores y monitores de la modalidad de Educación Ambiental de la “Escuela profesional Dehesarrollando” de la Mancomunidad Sierra de Montánchez nos fuimos de ruta por Valdemorales.


Valdemorales es un pequeño pueblo situado en la Comarca de la Sierra de Montánchez. Rodeado por montañas. Por un lado el Cerro Pajar, las Torrecillas y la Cañailla. Por otro lado la Sierra de San Cristóbal, Cancho Águila y Cerro Limón. Las corrientes de agua más importantes son el Arroyo de Santa Ana y el Regato de la Cañailla.

Panorámica de Valdemorales.
A 45 km de Cáceres y unos 40 km de Don Benito y Villanueva de la Serena. Con una superficie de 9,9 km² y una población de 198 habitantes según el INE para el 2017. Llegó a contar con una población de 1000 habitantes en 1940, que emigraron hacia Cataluña y Madrid.

Su población se dedica, mayoritariamente, al cultivo del olivo y la higuera.

El nombre original del pueblo era Valle de los Morales, ya que existían muchos morales en el valle. Actualmente sólo queda un Moral centenario situado en el Colegio de la localidad.

Moral centenario.


A los habitantes de esta localidad se les conoce por el gentilicio de Corcheros, nombre que se debe a la profesión de sacadores de corcho que se desempeñaba en esta localidad y que pasaba de generación en generación. Profesión que ejercían tanto dentro de Extremadura como fuera. Actualmente aún sigue habiendo en la localidad sacadores de corcho.

Artesanía de corcho realizada por los corcheros de la localidad.

Artesanía de corcho realizada por los corcheros de la localidad.

Comenzamos el recorrido desde el Pozo situado en la Plaza Castilla, llamado Pozo Nuevo.

Pozo Nuevo.



Continuamos el recorrido visitando el Moral centenario y varios pozos situados en la periferia de la localidad, entre los que destaca el pozo de “El Pocito” que data del S.XVIII de manantial de agua Cárdena. Conocido también como el pozo del agua azul.


Pozo "El Pocito".

En nuestro recorrido pasamos por uno de los monumentos más importantes de esta localidad, la Iglesia Parroquial de San Andrés Apóstol, del S.XVII, de estilo barroco. De mampostería con refuerzos de granito. Destaca el retablo del S.XVIII que cobija la imagen de San Andrés también del mismo siglo.

En 1977 las bóvedas y arcos se derrumbaron, siendo reconstruidos con la colaboración de los vecinos del pueblo y amigos y conocidos de los habitantes del lugar.
Iglesia Parroquial de San Andrés Apóstol.

Saliendo de la localidad, y dirigiéndonos hacia el Cerro Limón,  pasamos por el puente del Molinillo y el Arroyo de Santa Ana, así como por el Camino del Cordel (Ruta de Trashumancia de ganado vacuno y ovino), hasta que llegamos al Cerro Limón primera parada del trayecto y donde encontramos el Castilijillo, con una altura de 500 m y donde podemos ver asentamientos árabes.


Puente del Molinillo.


Panorámica de Valdemorales. Al fondo podemos ver la zona de los Baldíos.
Fotografía realizada desde el camino del Cerro Limón.

Vista del Castilijillo.
Asentamientos árabes en el Castilijillo.


Asentamientos árabes en el Castilijillo.
Seguimos nuestro recorrido llegando a la Noria de la Encalada. Según los lugareños lugar donde los árabes daban de beber a sus caballos. Cuentan que bajaban de los asentamientos del Castilijillo a través de túneles para no ser vistos por los lugareños.


Compañeros de la modalidad de Educación Ambiental en la Noria de la Encalada.


Subimos por la Barrera de los Majuelos y la Canaleja, con vegetación muy variada. Podemos ver cultivos como el olivo y la higuera, conviviendo con el monte de jara, esparraguera y chaparros.


Preciosa flor de la Jara que podemos encontrar en primavera.

Llegamos al Camino de la Sierra y bajamos en dirección al pueblo, encontrándonos otra vez con el Camino del Cordel, el cual seguimos. Pasamos por el Camino de las Villarejas hasta salir al Camino de la Fuente de Santa Ana o "Ruta del Colesterol" como es llamado por los lugareños.

Camino de la Sierra. 


Seguimos el Camino de la Fuente de Santa Ana en dirección al pueblo para terminar nuestro recorrido por este pequeño Valle, pasando por la Cruz (lugar hasta el que se desplaza la procesión del entierro el viernes de Semana Santa) y llegando hasta el final de la ruta que es la plaza de España donde volvemos a encontrarnos la Iglesia de San Andrés Apóstol y el Ayuntamiento de la localidad.

Puerta lateral de la Iglesia Parroquial de San Andrés Apóstol.


Ayuntamiento de Valdemorales situado en la Plaza de España.



lunes, 5 de febrero de 2018

RUTA POR ARROYOMOLINOS Y SU HISTORIA

 RUTA POR ARROYOMOLINOS Y SU HISTORIA
DISTANCIA RECORRIDA: 11'05Km

El día 2 de Febrero de 2018 realizamos una nueva ruta senderista por Arroyomolinos. Este municipio se ubica en la zona de transición entre la Sierra de Montánchez y las Vegas del Guadiana. La Sierra de Montánchez junto a la de Guadalupe, San Cristóbal, Centinela y San Pedro constituyen la divisoria de las cuencas del Tajo y el Guadiana. Esta ubicación geográfica provee de dos diferentes tipos de relieve que, a su vez, constituyen dos unidades paisajísticas distintas. Por un lado, el área montañosa, al norte, con fuertes pendientes, sin que llegue el término a las cimas superiores, que pertenecen a Montánchez y cuyo pico más alto se acerca a los 1.000 metros.Por otro lado, una zona con altitudes de 360 y 420 metros y suaves pendientes, que se vuelven abruptas en la sierra de El Saltillo, extendiéndose hacia el sur hasta alcanzar los límites de la provincia de Badajoz.
La sierra destaca geológicamente por su gran cantidad de rocas graníticas. Estas son muy variadas en cuanto a su tamaño, existiendo algunas zonas en las cuales se aglomeran conformando enormes "canchales". Junto al granito, pero ya en algunas zonas muy localizadas, la pizarra y en menor medida el cuarzo blanco también hacen acto de presencia. En cuento a las grandes extensiones adehesadas que conforman el resto del territorio, hemos de resaltar las características afloraciones de pizarra que salpican la zona. No obstante, también existen materiales aún más antiguos como son las cuarcitas, que forman pequeñas colinas llamadas popularmente "morras".
Es de destacar los 115'67 km² de extensión total con que cuenta Arroyomolinos, siendo el de mayor superficie de la comarca.

                                                        Entrada Arroyomolinos
                                                                Vista del pueblo


Tras haber cogido fuerzas en la “Churreria Fragoso” con sus deliciosos churros, comenzamos nuestra ruta tomando la plaza de Juan Carlos I como punto de partida. Continuamos por la calle cervantes hasta la Ermita de San Sebastián, sencilla y coqueta y de estilo renacentista. San Sebastián como patrón del pueblo, cuenta con fiestas en su honor que se celebran el 18,19 y 20 de enero.


                                      Nuestra compañera Inés en la Ermita de San Sebastián




Proseguimos la ruta hacia la sierra por la calle San Sebastián para encontrarnos con el monumento a los caídos constituido por tres cruces labradas en el granito de la sierra, las cuales conmemoran la batalla conocida como la “Sorpresa de Arroyomolinos”, ocurrida el 28 de octubre de 1811 durante la Guerra de Independencia contra el ejército francés de Napoleón y contando como aliados con el ejercito Inglés y el Portugués.


                                                      Sergio, Esther y Marcos en Las tres cruces

                                                                                  
Hay que destacar que todos los años en conmemoración a este hecho histórico todo el pueblo se implica y representa lo acaecido aquel 28 de octubre de 1811, de una manera muy fiel y espectacular. Particularmente y gracias a nuestras compañeras Inés e Isa y la hermana de una de ellas, que pertenecen a una de las asociaciones que participan en dicha representación, nos mostraron algunos trajes y armas, así como una muestra de cómo suenan los tambores en la batalla. Todo ello no hizo más que despertarnos aún más las ganas de asistir a la representación del año próximo.

                                                                                  Representación de la Sorpresa de Arroyomolinos




A continuación, seguimos subiendo hacia algunos de los más de 30 molinos de origen árabe que aun quedan por la zona. En concreto visitamos el molino de Marciala y un poco más arriba estaba la casa de Marciala pasando un pequeño regato con una gran piedra en que usaban los niñ@s de la zona para tirarse como si fuera un tobogán porque resbalaba mucho.



                                                                                                                Molino de Marciala 


                                                                                                                       Casa de Marciala


Descendemos un poco por el sendero hasta llegar a un mirador donde puede apreciarse la belleza del entorno con sus grandes canchos y peñas, así como una panorámica preciosa del pueblo. A esta altura encontramos otro molino, donde podemos apreciar mejor las partes de que se componían y como funcionaban, gracias a las explicaciones de nuestros compañeros Toñín, Isa e Inés.
Foto









Continuamos hasta el siguiente molino bajando hacia el pueblo.
En nuestro camino damos con la piedra conocida como “Piedra del deo Meñique”, gran mole de granito de unas 40 toneladas que en tiempo atrás permitía que con una leve presión el movimiento oscilatorio de ésta insólita piedra.








                                                                                                         Piedra del deo meñique
Bajamos un poco hasta dar con un manantial de agua que los vecinos conocen como “La Fuente de los ojos malos”, ya que se acudía a esta fuente cuando se padecía algún tipo de infección en los ojos y se lavaban con este agua para tratarlos.

Continuamos nuestro camino hasta llegar hasta otro manantial conocido como “ La Fontalba”, nueva muestra de la riqueza hídrica de este lugar.

                                                                                                                        Fontalba

Seguimos la bajada hacia una calle peculiar conocida como “la callejina del diablo”.
Tras bajar la callejina, vamos a dar al último molino y el más cercano a la población.





Seguimos el curso del arroyo donde se encuentra otra fuente conocida como “Fuente La Limilla” donde solían acudir los lugareños a lavar la ropa hasta ya entrados los años 80, según nos cuentan algunas compañeras vecinas del pueblo.


                                                                                                                     Fuente La Limilla

Nos adentramos en el centro del pueblo hasta dar con el consistorio y finalizar nuestra ruta por Arroyomolinos al toparnos con la majestuosa iglesia de Nuestra señora de la Consolación con su pórtico de estilo plateresco muy peculiar ya que cuenta con numerosas calaveras talladas en la parte superior, así como por su gran arco lateral y su torre campanario convirtiéndola en un iglesia de grandes dimensiones





Sin duda alguna, Arroyomolinos nos ha sorprendido por su riqueza natural, patrimonial y cultural que ha demostrado ser muy rica y cuyos vecinos cuidan con mucho orgullo. Os recomendamos visitar este precioso rincón de Extremadura tan lleno de historia y naturaleza.